Cuando este número de Anaporc esté en tus manos ya se habrá acabado prácticamente el año 2012, un año complicado en el que muchas explotaciones vivieron con la “espada de Damocles” del cierre debido, entre otras circunstancias, al incremento de los precios de las materias primas y a la adaptación obligatoria de las granjas a la normativa de Bienestar Animal, lo que ha generado importantes costes para el sector… y enfocaremos todas nuestras expectativas y esperanzas para un año 2013 que se nos vislumbra, según los analistas, con incertidumbres, pero también con interesantes repuntes económicos para nuestro mercado.