INTRODUCCIÓN
Las enfermedades parasitarias constituyen hoy día un problema
importante en numerosas especies domésticas, que
a menudo pasan desapercibidas a simple vista pero causan
graves pérdidas económicas de tipo subclínico. La especie
porcina no es una excepción. A pesar del gran desarrollo de
otros factores como la genética, instalaciones y nutrición,
puede considerarse que el problema parasitario ha aumentado
en los últimos años por diversos factores, entre los que se
encuentra la mezcla de edades u orígenes, la falta de limpieza
de instalaciones, errores en el manejo, predisposición mayor a
parasitosis en cerdas como consecuencia de la agrupación en
gestaciones (Bienestar Animal), elección de moléculas o pautas
inadecuadas etcétera. Podemos encontrarnos con un problema
grave en las explotaciones incluso con brotes clínicos (por
ejemplo Trichuris suis causa problemática parecida a disentería
hemorrágica), pérdidas productivas (directas o indirectas por
inmunosupresión o predisposición a otras enfermedades) y
descenso del valor de los productos. Hay que considerar que
las infecciones parasitarias son muy importantes en la producción,
tanto como las infecciones víricas o bacterianas.
Joana Ceia, Carlos Lasa, José Ángel Añón, Ramón Fabré Ecuphar Veterinari
PATOLOGÍA, PARASITOLOGÍA, HEPÁTICA, HÍGADO, ASCARIS, CEBO