Durante los últimos años, se han incrementado los estudios
acerca de la microbiota debido a las nuevas tecnologías de secuenciación
de nueva generación. Estas herramientas permiten
determinar la composición global de la microbiota en un sitio
particular del cuerpo sin la necesidad de aislar los microorganismos.
A través de análisis bioinformáticos complejos, es posible
establecer la composición de las bacterias que habitan un
determinado nicho ecológico a través de secuenciación masiva
y análisis del gen 16S del ARN.