Lo que todo el mundo se pregunta es, ¿por qué no hay cerdos para sacrificar?
La respuesta se puede encontrar si unimos y analizamos ciertos puntos relativos tanto
a incidencias nacionales como internacionales.
Si unimos los factores antes mencionados:
Altos costes de producción por el incremento del precio de los piensos y la energía.
Elevado precio del lechón.
Bajada de la cabaña alemana y neerlandesa.
Bajada de producción de lechones en España.
Se puede vaticinar que el elevado precio del lechón, junto a los elevados costes de producción ha hecho que los
ganaderos mantuvieran plazas vacías por las probablesperdidas que pudieran sufrir, metiendo exclusivamente
los cerdos necesarios para atender los contratos firmados.
Todos estos factores han hecho que los ganaderos pensaran dos veces en meter animales y es por ello que
ahora mismo y a futuro, será difícil encontrar cerdos para sacrificar.
